Sería anticuado decir que la transformación digital es algo que se viene cuando es evidente que está pasando. Hemos adoptado cada hábito y nuevas herramientas a nuestro día a día que si, miramos hacia atrás, resulta vertiginoso todos los cambios que hemos experimentado en poco tiempo.
Si una cosa dejó en claro el vivir una pandemia en estos tiempos, es la inmediata necesidad de facilitar los diferentes procesos de trabajo y poder realizarlos a distancia. Para las empresas de todos los tamaños, asumir el desafío de modernizar tanto las interacciones dentro del equipo de trabajo como con nuestros clientes, significó un gran salto en muy poco tiempo.
En este plano, perder el miedo y asumir estos procesos como cambios positivos a nuestros proyectos, es el primer paso para lanzarse a la piscina.
¿De qué estamos hablando?
La transformación digital es un tema que se ha conversado en diferentes oportunidades y niveles. En el año 2019 se publicó la Ley 21.180, que regula y establece la ruta de trabajo para la modernización de las entidades estatales en nuestro país. Desde este año, que entró en vigencia dicha normativa, Chile comenzó su camino hacia la digitalización como política de Estado. Hoy es norma que todos los procesos de administración pública deben ser en soporte digital, y su forma física, la excepción y respaldo. Y eso que solo hace un par de años la realidad era al revés.
Este caso es un ejemplo de que la transformación digital es algo que en el año 2021 es indispensable. Lo digital convierte los procesos en datos. Y esta traducción logra reducir tiempos de trabajo, automatizar labores, inmediatizar la comunicación entre colaboradores, acceder de forma completa y ordenada a la información necesaria para una mejor gestión. Básicamente, ganancias de todo tipo.
Sin más, LicitaLAB nació como una solución accesible para sistematizar y entender de mejor manera el Mercado Público. Y como nosotros, existen un montón de alternativas que buscan cubrir las diferentes necesidades de una empresa: desde asuntos complejos como la contabilidad, u otros tan cotidianos como la forma en cómo vendemos o cómo interactuamos con nuestros clientes.
Desafíos
Enfrentar la transformación digital como un algo beneficioso para nuestros proyectos es el primer impulso. Sabemos que en muchos casos la limitación de presupuesto o la falta de especialización en las diferentes áreas ‘de lo digital’, puede ser una piedra de tope para avanzar. Sin embargo, es necesario perder el miedo al cambio y buscar las alternativas que hoy ofrece la tecnología.
Mantenerse a la vanguardia y consolidar la presencia digital propia es vital para avanzar en este rumbo. Formas hay muchas, las más comunes como un sitio web propio o estar en un marketplace (Mercado Libre, Facebook, etc), pueden ser un excelente punto de partida. Incluso con una buena presencia en redes sociales -que hoy son de uso libre y gratuito- puede ser un gran diferenciador.
Por otro lado, estar en constante capacitación sobre nuevas tendencias y tecnologías siempre es útil. No solo porque te permitirá sacarle el jugo a las nuevas herramientas, sino que también te ayudará a comprender mejor los cambios que hay a diario. Academias y tutoriales hay por montón. Incluso iniciativas estatales, como las charlas y cursos de Sercotec o Becas de Corfo, son oportunidades que tienes que tener siempre en vista.
Por dónde empezar
Por ahora ya te comentamos algunos primeros pasos, pero lo importante siempre es perder el miedo al cambio. Cuando se haya superado eso, establecer un plan de digitalización y sus objetivos servirá de guía para entender qué es lo que falta y por dónde debe ir tu empresa.
La transformación siempre debe pensarse desde dentro hacia fuera. Comenzar por simplificar los procesos de trabajo, respaldar archivos en la nube, acceder a herramientas de gestión de todo tipo. Estos puntos cambiarán las dinámicas diarias en el trabajo y acelerarán procesos que de forma manual no podrían tener la misma velocidad.
Por ejemplo, y en un caso muy cercano a nosotros, si tu meta es poder aumentar las ventas en Mercado Público, puedes comenzar por analizar qué tipo de herramientas tienes a mano. En ese aspecto, el motor de LicitaLAB es funcionar como un espacio donde podrás tener toda la información que necesitas para armar estrategias que te brinden ofertas ganadoras.
El punto de todo esto es no quedarse atrás. La transformación digital está sucediendo frente a nuestros ojos y ya eres parte de eso. Solo hay que aprender a sacar provecho de todos sus beneficios.